La historia que conmocionó a los oyentes de Titi Ciabattoni en La Popu.

Mirada fugaz

QUÉ HAGO TITI

12/05/2025 | 15:41 | Una madre de dos hijos relató su historia de amor y desamor, que inicia en una escuelita de fútbol. Entre miradas y mensajes, descubrió una conexión inesperada que transformó su vida y la llevó a decisiones difíciles.

Audios

En un relato íntimo y conmovedor, una mujer, cuya identidad permanece en el anonimato, compartió con Titi Ciabattoni su historia de amor, desamor y autodescubrimiento. 

Todo comenzó en un lugar tan cotidiano como la escuelita de fútbol de su hijo, donde una mirada fugaz con otro papá desencadenó una conexión inesperada que cambió su vida.

Esta madre de dos hijos llevaba más de una década con su pareja, pero la relación estaba desgastada. "Hacía tiempo que las cosas no estaban bien", confesó, admitiendo que, aunque no todo era terrible, la chispa se había apagado. 

A pesar de sus dudas, no encontraba el valor para dar el paso y terminar la relación. "No me animaba a dejarlo, no sé por qué", dice con sinceridad, reflejando una lucha interna que muchas personas enfrentan.

Todo cambió en los entrenamientos de fútbol de su hijo. Entre charlas de grupo de padres y partidos infantiles, cruzó miradas con otro papá, también comprometido. 

Lo que empezó como un coqueteo sutil —“una miradita, como diciendo ‘qué golazo’”— pronto se convirtió en mensajes privados. "Sacó mi número del grupo de fútbol y empezamos a hablar", recordó. Esas conversaciones diarias, con un simple "Hola, linda, ¿Cómo estás?", le devolvían una alegría que había olvidado.

/Inicio Código Embebido//Fin Código Embebido/

Las charlas se intensificaron, y ambos, aún en pareja, comenzaron a compartir más que mensajes. Se encontraron a escondidas y "pasó lo que tenía que pasar". Ella, que nunca había tenido una aventura, se sintió como adolescente nuevamente. Él, diez años mayor, le dedicaba canciones y palabras que la hacían sentir viva. "Me hacía sentir algo que en diez años no había sentido", admitió.

Ambos dejaron claro que solo buscaban "pasarla bien", pero los sentimientos pronto complicaron las cosas. Los mensajes se volvieron románticos, con fotos y videos que ella guarda con cariño. Sin embargo, la realidad los alcanzó: la esposa de él descubrió la relación.

La protagonista tomó una decisión que venía postergando: separarse de su pareja. No fue por su amante, asegura, sino porque ya lo había decidido mucho antes. Él también se separó, pero su relación con su ex seguía siendo un obstáculo. 

A pesar de las dificultades, continuaron viéndose, incluso en momentos robados en la tribuna o el baño de la cancha, viviendo un amor apasionado pero frágil.

Todo cambió cuando ella se enamoró y se lo confesó. "Sé que está mal, porque él tiene pareja", admitió. Poco después, él desapareció sin dejar rastro. "Hace un tiempo que no sé nada de él. No sabés cuánto lo extraño", le confesó a Titi, con el corazón roto y sin saber qué hacer.

/Inicio Código Embebido/

/Fin Código Embebido/