Declaraciones impactantes
29/05/2025 | 08:21 | La hija de Jorge Rial confesó en una entrevista que siempre le dijeron que su madre "tenía problemas psicológicos". En un diálogo abierto, habló también sobre su salud y la carga de la fama.
La controversial figura de Morena Rial se mantuvo alejada del foco mediático en las semanas recientes, especialmente tras un tenso episodio con el notero Rodrigo Bar de LAM. Sin embargo, este miércoles hizo su aparición en la escena pública a través de una emotiva entrevista donde habló sobre su infancia y las dificultades que enfrentó debido a la exposición mediática desde una edad temprana.
En una conversación con Santiago Riva Roy para LAM (América TV), la hija de Jorge Rial compartió detalles sobre su estado emocional: "Yo hoy estoy bien. Estoy tranquila. Hay un par de cosas que tengo que solucionar, pero estoy tranquila. No lloro hace dos años, casi. No me acuerdo cuándo fue la última vez que lloré. No lloro a diario, la verdad".
Ante la pregunta de si la fama y la constante exposición le generaron problemas a lo largo de su vida, Morena respondió sinceramente: "Y sí, pesa. Yo estoy bien, no me falta nada. Mis hijos tienen salud, yo tengo salud. Quizás me merecía una infancia más normal".
Además, Morales realizó un análisis de su vida, afirmando: "Mucho de lo que soy es también lo que pasé. Todos hubiéramos querido que algunas cosas fueran diferentes. No digo que es mala suerte; dentro de todo, estoy bien. No me falta nada. Mis hijos tienen salud y yo también".
Durante la entrevista, Riva Roy indagó sobre su conexión con el hecho de que no era la hija biológica de sus padres. Sobre esto, Morena explicó: "Siempre supe que era adoptada. Mi papá siempre nos dijo que había mucha maldad en la calle, que no podés esperar que venga alguien y te lo diga". Esta enseñanza marcó su vida desde muy joven.
Finalmente, hizo referencia a la relación que mantiene con su madre Silvia D'Auro, ex esposa de Jorge Rial, y aseguró: "Siempre fue un monstruo. Desde el minuto cero. No se cambia de la noche a la mañana. Nunca lo entendí... todo el mundo dice que tenía problemas psiquiátricos".
Morena añadió: "Desde mi punto de vista, creo que sí, pero no era algo que tratara. Le servimos de escudo para que no se terminara la relación. Después lo pudo sostener varios años más, volviéndolo loco. Éramos el intermedio entre ellos dos, para que no se rompiera una relación que ya estaba rota".